Ofrece recomendaciones prácticas y adecuadas para un teletrabajo eficaz que sean aplicables a una amplia gama de agentes; apoyar a los encargados de la formulación de políticas en la actualización de las políticas existentes; y proporcionar un marco flexible mediante el cual tanto las empresas privadas como las organizaciones del sector público puedan elaborar o actualizar sus propias políticas y prácticas de teletrabajo.