Programa jóvenes rurales emprendedores. SENA. Colombia
Fomentar la empresarialidad rural, mediante creación de pequeñas empresas viables y sostenibles que apunten a la generación de ingresos de la población objetivo y a incrementar la productividad y competitividad del campo.
- Jóvenes rurales de bajos estratos socioeconómicos, entre 16 y 35 años.
- Otros grupos poblacionales que se encuentran en condición de vulnerabilidad, como desplazados por la violencia y por fenómenos naturales, discapacitados, reclusos, menores infractores, mujeres jefas de hogar, desmovilizados y soldados campesinos, sin límite de edad.
Dirigido a promover nuevos emprendimientos que permitan atenuar la migración del campo a la ciudad, aumentar la productividad del sector rural y disminuir el desempleo estructural.
Se trata de un programa de formación, de carácter teórico-práctico, que plantea el desarrollo de competencias para la realización de proyectos productivos en sectores estratégicos y de alto desempeño ocupacional. Preferentemente de las áreas agrícola, pecuaria, pesquera, agroindustrial, comercial o de servicios.
El programa se inicia con la definición de los proyectos productivos por parte de las unidades de emprendimiento del SENA, en alianzas con las instancias locales y con los mismos jóvenes beneficiarios. Luego, se establece el contenido de la formación, en función de los proyectos a realizar.
Los estudiantes se gradúan cuando logran la competencia necesaria para desarrollar el proyecto que escogieron, sin exceder el tiempo máximo establecido para cada proyecto que es de cinco o seis meses. La duración temporal de los procesos formativos varía de un proyecto a otro y de un grupo de estudiantes a otro.
Una vez puesto en marcha el proyecto, se realiza el seguimiento por parte de la unidad de emprendimiento del SENA por un periodo de cuatro o cinco meses. Terminada esta etapa, la asesoría puede continuar según demanda de los interesados, por ejemplo, incluyendo asesoría sobre cómo elaborar un plan formal de negocio y acceder a fuentes de financiación.
- Transferencia intergeneracional de conocimientos, permite a los padres mejorar las técnicas de producción aplicadas gracias a lo aprendido por sus hijos y así mejorar la productividad de sus explotaciones rurales.
- Oportunidad de generar ingresos junto a la formación complementaria.
- Flexibilidad del proceso formativo.
- Participar en el desarrollo de proyectos productivos propios genera sentido de pertenencia entre los participantes.
- En 2007 y 2008 se pusieron en funcionamiento 2.081 unidades productivas, la mayoría de éstas de pequeña escala e informales.
- La inserción laboral ha aumentado un 14%, asimismo se logra un aumento en el ingreso laboral.
- 77% de los alumnos manifiesta que lo aprendido le ha servido para mejorar sus ingresos.
- 62% de los egresados manifiesta que lo aprendido le ha servido para mejorar sus condiciones laborales.
- Atiende a todos los municipios del país, llegando incluso a cubrir pequeñas poblaciones, alejadas y de difícil acceso.
- Bajo nivel de abandonos, inferior al 10% de los jóvenes matriculados.
- En los años 2007 y 2008 se graduaron 91.000 y 145.000 alumnos, respectivamente; lo cual revela un crecimiento notable respecto a los 55.0000 alumnos de 2004.